Eventualmente, el aspecto devorador del Universo nos encontrará para cerrar el ciclo de todo lo manifiesto. Creación, preservación y destrucción se suceden por los Eones.
Ser conciente de esta mecánica te abre infinitas posibilidades que el humano mágico/místico que hemos sido siempre parece haber olvidado por atender el mundo contingente.